En Aranda e Hinojosa, la verificación de la información de sostenibilidad constituye un proceso técnico y riguroso que garantiza la fiabilidad, trazabilidad y transparencia de los Informes de Sostenibilidad (IS) o Estados de Información No Financiera (EINF).
El primer paso esencial antes de iniciar cualquier trabajo de aseguramiento es el Proceso de Aceptación del Encargo, cuyo resultado se formaliza en un documento contractual denominado Carta de Encargo.
Este proceso no solo establece el marco de actuación profesional, sino que también garantiza la independencia, objetividad y competencia técnica del equipo verificador.
La importancia de la aceptación del encargo
Antes de iniciar cualquier trabajo de verificación, se realiza un proceso de evaluación y aceptación del encargo, cuyo objetivo es asegurar que se cumplen las condiciones necesarias para ofrecer un servicio con las debidas garantías técnicas, éticas y de independencia.
Esta fase es clave para definir las responsabilidades de las partes, la naturaleza del encargo y el alcance del trabajo que se llevará a cabo.
Durante esta etapa, el verificador debe confirmar que la empresa:
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Ha elaborado su Informe de Sostenibilidad (IS) conforme al marco normativo aplicable.
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Reconoce y comprende sus responsabilidades en la preparación del informe, incluyendo los procesos de identificación de aspectos materiales, riesgos, oportunidades e indicadores de sostenibilidad.
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Está dispuesta a facilitar el acceso a toda la información relevante, así como a las personas implicadas en la generación de los datos.
Solo cuando estas condiciones se cumplen, puede emitirse la Carta de Encargo, documento que formaliza la relación profesional.
Responsabilidades de las partes involucradas
Responsabilidad de los administradores
Los administradores de la entidad son responsables últimos del contenido del Informe de Sostenibilidad.
Esto implica:
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Asegurar que la información ha sido elaborada conforme a los estándares aplicables (actualmente Ley 11/2018 y, próximamente, la CSRD).
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Diseñar y mantener los sistemas de gestión y control interno que permitan obtener datos fiables.
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Identificar los asuntos materiales, así como los impactos, riesgos y oportunidades (IRO’s) vinculados a la actividad.
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Facilitar al verificador toda la información y documentación necesaria para el desarrollo del trabajo.
Asimismo, la dirección debe emitir una Carta de Manifestaciones, confirmando la veracidad de la información proporcionada y la razonabilidad de las estimaciones empleadas.
Responsabilidad del verificador
Por su parte, el verificador tiene la obligación de:
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Aplicar las normas y guías técnicas vigentes (como la NTVIS o las Guías 47 y 56 del ICJCE).
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Mantener la independencia, objetividad y confidencialidad durante todo el proceso.
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Diseñar procedimientos de revisión basados en el riesgo, identificando las áreas susceptibles de incorrecciones materiales.
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Emitir un informe de verificación con seguridad limitada, que refleje de forma clara las conclusiones obtenidas.
La Carta de Encargo: base contractual y técnica del proceso
La Carta de Encargo es el documento que formaliza los términos del trabajo entre la entidad y el verificador.
En ella se detallan los elementos esenciales del encargo, entre los que destacan:
Objeto y alcance
Se define si la verificación abarca el EINF o el Informe de Sostenibilidad completo, así como los criterios normativos aplicables (ESRS, GRI, ISSB, entre otros). También se delimita el nivel de aseguramiento: en la mayoría de los casos, seguridad limitada.
Procedimientos de revisión
El trabajo puede incluir entrevistas con la dirección, revisión documental, análisis de procesos de recopilación de datos, comprobaciones por muestreo y contrastes de los indicadores de desempeño.
Independencia y calidad
El verificador debe acreditar su cumplimiento con los principios del Código Ético del IESBA y disponer de un sistema de gestión de la calidad conforme a la NIGC 1.
Este requisito garantiza que las conclusiones emitidas sean técnicamente sólidas y libres de conflictos de interés.
Limitaciones y responsabilidades
La carta recoge las responsabilidades legales de cada parte, el calendario de ejecución, los honorarios y las cláusulas de limitación de responsabilidad, así como la aceptación formal por parte de la empresa.
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El proceso de aceptación de un encargo de verificación no es un simple trámite administrativo, sino una fase de control y confianza que asegura la validez del trabajo posterior.
En Aranda e Hinojosa, aplicamos un enfoque metodológico riguroso, alineado con las mejores prácticas internacionales, para que las organizaciones puedan avanzar hacia un modelo de reporting sostenible, fiable y auditable.
Para más información no dudes en contactar con: rsc@arandaehinojosa.es
